Mil personas, entre las que hay 150 científicos de alto nivel, perseguirán el dopaje en los Juegos Olímpicos de Londres, que se disputarán del 27 de julio al 12 de agosto (del 8 al 11 agosto será el turno del Taekwondo). El laboratorio estará en Harlow, a unos 30 kilómetros del Parque Olímpico.
David Cowan, que dirigirá el equipo científico, profesor en el King’s College de la capital británica, ha mandado un mensaje muy claro a los posibles tramposos: “Nuestro laboratorio tiene la tecnología más avanzada en la historia de los Juegos Olímpicos, y nuestro mensaje a aquellos que tengan la intención de recurrir al dopaje es muy claro. Vamos a atraparlos”.
El laboratorio analizará 6.250 muestras, entre las que estarán las de todos los medallistas. Otras se harán por sorteo o serán dirigidas a aquellos deportistas que puedan resultar sospechosos. Se trabajará 24 horas al día y los deportistas podrán ser controlados en la competición o fuera de ella, respetando siempre las reglas de la WADA. Se asegura que podrá detectarse la EPO de última generación y, muy posiblemente, la Hormona del Crecimiento.
Antes de la hormona