Green Room
A los Fiskales Ad Hok le cancelan un recital en Puerto Montt así que le consiguen un recital de reemplazo en una un local de la UDI que queda en una parcela escondida, lamentablemente, y por casualidad, ven algo que no deberían haber visto, y quedan encerrados entre puros fachos pobres que se los quiere pitiar. O algo así es la trama.
Muy entretenida, no decae nunca. Aunque no muestra nada nuevo. Pero es un buen thriller. Y muy bien actuada, lo que siempre se agradece.
Uno queda con ganas de ver más películas de Anton Yelchin, pero después uno recuerda que se murió.
En fin.
8.0/10.0